Un Año Después: La Lucha de las 21 Familias del Edificio Amantes en Teruel
El pasado 13 de junio se cumplió un año desde que el Edificio Amantes, situado en la calle de San Francisco de Teruel, se desplomara en unos segundos, dejando a 21 familias sin hogar. Este devastador acontecimiento no solo les arrebató sus viviendas, sino también sus recuerdos y objetos personales. A día de hoy, sus vidas siguen siendo una montaña rusa de emociones, ansiedad y lucha.
La Tragedia y sus Consecuencias
El desplome llegó sin previo aviso y trajo consigo una serie de desafíos legales y financieros que han complicado aún más la situación de los afectados. Muchos de ellos siguen pagando hipotecas de inmuebles que ya no existen y se encuentran enfrentando la posibilidad de tener que asumir una deuda de 1,6 millones de euros por el desescombro del edificio y la indemnización a los vecinos de los inmuebles adyacentes.
Las compañías aseguradoras están a la espera de que se determinen las causas del derrumbe para decidir sobre las indemnizaciones. Mientras tanto, los afectados se ven obligados a costear los servicios de peritos y abogados, sumiendo aún más en la incertidumbre sus ya vacíos bolsillos.
Vivir en la Incertidumbre
Las familias afectadas actualmente residen en pisos de alquiler pagados por el Ayuntamiento de Teruel mediante un acuerdo municipal que se renueva cada seis meses. Esta situación, lejos de ofrecerles una estabilidad, genera una gran ansiedad entre los afectados. José Luis Pérez Martínez, uno de los damnificados, resume el sentir general: "Necesitamos poder comprar una vivienda y acabar con este sinvivir".
Cada día, los afectados pasan cerca del lugar donde una vez se levantaba su hogar. La carga emocional varía de una persona a otra; mientras algunos han desarrollado un "callo en el corazón" como describe José Luis, otros, como su mujer, evitan el lugar para no revivir el trauma.
Perder Todo, Menos la Esperanza
El hundimiento del edificio no solo arrebató viviendas, sino también la alegría de muchas personas. Guillermo Narro y su esposa, Gracia Losada, habían invertido todos sus ahorros en la reforma de un piso que compartían con la hermana de él. Este sueño se convirtió en pesadilla tras el derrumbe, lo que incluso les llevó a plantearse un cambio de ciudad. Sin embargo, se quedaron en Teruel y hoy esperan un hijo, una nueva ilusión que les ayuda a seguir adelante.
Por otro lado, las labores de desescombro han sido una gran decepción, ya que solo se han recuperado objetos de menor valor como ropa y fotos, y no las joyas o demás bienes que hubieran ofrecido un pequeño consuelo. Feliciana Espinosa, madre de tres hijos, vio caer el edificio y asegura que no volverá a vivir en esa calle para no reavivar los dolorosos recuerdos.
La Falta de Sensibilidad Administrativa
El portavoz de los vecinos, Javier Carbó, afirma que, aunque sienten el apoyo de la población, la Administración ha mostrado una falta de sensibilidad preocupante. Los afectados han presentado una reclamación patrimonial contra el Ayuntamiento y, aunque la esperanza inicial de una rápida solución se ha desvanecido, buscan agotar todas las vías administrativas antes de llegar a los tribunales.
Rehaciendo sus Vidas
Matilde y Ramona Toribio, octogenarias que vivieron en el edificio durante décadas, han encontrado consuelo en la vida comunitaria. Tras refugiarse en su casa de Calomarde durante el verano, regresaron a Teruel en invierno. La familia y amigos se han volcado en apoyarlas, y ambas han llenado sus días con actividades parroquiales para alejarse del dolor provocado por la pérdida.
Félix Gargallo, otro de los afectados, también recuerda con emoción los 49 años vividos en el edificio y lamenta que ahora no tenga nada. La frustración y la indignación son un común denominador entre los damnificados, quienes expresan su descontento con la falta de atención recibida y exigen una rápida resolución de las causas del derrumbe.
En Zaragoza Inmuebles, liderados por José Mª. Herranz, ofrecemos asesoría integral en el ámbito inmobiliario. Contacte con nosotros para ayuda en compra, venta o alquiler.